En una isla conocida por sus arenas doradas y extensos arenales, las playas negras de Fuerteventura ofrecen un contraste sorprendente. Su origen volcánico les otorga un paisaje único, con arena oscura, grava o piedras que se funden con el azul intenso del océano. Son lugares menos transitados, con un carácter salvaje y auténtico, perfectos para quienes buscan escapar del turismo más masivo y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.
Playas negras destacadas en Fuerteventura
Entre las más representativas se encuentran:
- Gran Tarajal: Playa urbana de arena negra fina, amplia y con servicios. Es una de las más conocidas y utilizadas por la población local.
- Pozo Negro: Una playa tranquila y poco concurrida, de arena oscura y cantos rodados, ideal para quienes buscan desconexión.
- La Lajita: Tramos de arena oscura y grava volcánica, rodeada de un entorno natural con acantilados y un ambiente muy relajado.

Silvia Gutiérrez
Actividades en las playas negras
Las playas de arena oscura en Fuerteventura permiten disfrutar de múltiples actividades:
- Landscape photography: los contrastes de color entre arena, mar y roca son espectaculares.
- Paseos y descanso: perfectas para caminar, relajarse y desconectar del ritmo urbano.
- Snorkel: en zonas de roca volcánica se encuentra abundante vida marina.
- Surf y bodyboard: algunas cuentan con oleaje fuerte, siendo atractivas para deportes de agua, aunque requieren precaución.
- Contemplación natural: la tranquilidad de estas playas invita a disfrutar de la calma y la belleza del entorno.
Servicios y recomendaciones
La mayoría de estas playas son de carácter virgen o semivirgen, por lo que conviene ir preparado:
- No suelen disponer de duchas, baños ni chiringuitos.
- Es importante llevar agua, comida y protección solar.
- Se recomienda calzado adecuado para caminar sobre piedras y grava.
- El oleaje puede ser intenso, por lo que se debe extremar la precaución al bañarse.
- Siempre es fundamental respetar el entorno y no dejar residuos.
Cómo llegar a las playas negras
El acceso varía según la playa:
- Algunas, como Gran Tarajal, están en núcleos urbanos y cuentan con accesos fáciles y servicios cercanos.
- Otras, como Pozo Negro o La Lajita, requieren recorrer carreteras secundarias o pistas de tierra hasta llegar a la costa.
- En todos los casos, es recomendable consultar previamente la ruta y tener en cuenta que la experiencia será diferente a la de las playas más turísticas de la isla.